lunes, 19 de julio de 2010

Reflexiones del barón

En una parte de la ciudad están de fiestas y ahora, en una noche tranquila de verano en la que ni el viento quiere pasar de ser brisa con sabor a mar, se oyen cohetes y se ilumina el negro cielo con ascuas de colores que lucen un instante y se desvanecen. Vuelve a estallar otra palmera multicolor y deja ver las estelas de humo de las que antes brillaron sobre nosotros. Pero en mi memoria no se enciende una luz que sustituya la tuya y aún a oscuras veo el rastro de tu recuerdo   

2 comentarios:

  1. bonito, me gusta esa forma de describirlo.
    Neko

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  2. Gracias Neko. Tienes ventaja para entenderme ya que me conoces en le realidad y sabes hasta donde puede llegar mi imaginación y fantasía

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